Hay mucha charla sobre 3:16. Por supuesto, siendo la puta de las modas que soy, no solo juego el juego sino que también leo y opino.
Algo que tienen en común muchas de las discusiones pasan por el sistema. El sistema pelado. Sin siquiera relacionarlo con la ficción.
Parece que de golpe a todos les agarró el síndrome Knizia y están buscando la satisfacción de jugar rol en interpretaciones del texto e interacciones de mecánicas duras. Pero se olvidan que las mecánicas están para facilitar la ficción.
Sí, la ficción. Lo más importante de la sesión de rol.
Ok, el sistema importa. Ok, la interacción social es muy interesante. Pero jugamos rol por la ficción. Cualquiera sea tu agenda creativa preferida, lo importante pasa por la materialización (no sé si es la mejor palabra) de una ficción compartida.
Juego diferentes tipos de juegos por diferentes razones. Pero nunca jugué rol si no me importara la ficción que se crea.
“¿Qué pasa si ningún jugador quiere tirar Dominance?” Entonces ninguno estaba prestando atención. ¡Emboscada automática!
“¿Y si solo tira el sargento porque los demás tienen bajo NFA?” Entonces el sargento está orquestando una emboscada magistral con órdenes explícitas de que nadie la cague. Claro que si lo sorprenden a él, hay mayores chances de que las tropas sean emboscadas (menos dados, más chances de que los aliens sorprendan a la tropa).
¿Necesito que el manual me diga esto? Por supuesto. Está ahí escrito. ¿Necesito que me dé 7 ejemplos como si fueran los movimientos válidos de un juego de tablero? Ni mierda. Para algo está el texto en su conjunto. Para que nosotros mismos creemos la ficción que nos interesa.
Ese tema en SG es desesperante. Son curiosas el tipo de cosas que están pasando por allá.
Luke Crane lo dice bien claro.
“¡No vendas tu juego a los storygamers!”
Creo que entiendo por dónde pasan los tiros.